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Sto caricando le informazioni... Mitología comparadadi Friedrich Max Müller
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Google Books — Sto caricando le informazioni... GeneriSistema Decimale Melvil (DDC)291.1Religions Other Religions Comparative Religion; Mythology (No Longer Used) MythologiesClassificazione LCVotoMedia:
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Müller aplica al estudio de esta disciplina un método revolucionario para su época: la filología. El análisis de las palabras y su evolución a través de los distintos pueblos le permite esbozar un panorama bastante amplio de un aspecto poco conocido de la historia del hombre: sus primeros balbuceos religiosos.
La expresión mitología comparada la debemos al alemán Friedrich Max Müller (1823-1900), hijo del poeta romántico Wilhelm Müller, quién también acuñó el término Religionswissenschaft, esto es, "Ciencia de las religiones"
. Devoto protestante y profesor de filología comparada en Oxford, no fue elegido en 1860 para la cátedra de sánscrito en dicha institución porque, entre otras razones -no era británico, sino teutón-, se decía que sus enseñanzas eran subversivas y "perturbadoras" para la fe cristiana.
Pionero en los estudios de sánscrito, obtuvo notoriedad por sus traducciones de las escrituras védicas (1849-1862), y por la edición de Sacred Books of the East (recopilación y traducción de textos orientales), publicado en quince volúmenes. Como sanscritista, estudió los Vedas con los métodos habituales de la filología, y en abril de 1856 expuso sus principios en su Oxford Essay, el cual incluía el escrito titulado Comparative Mythology65.
Tres años después, en 1859, Adalbert Kuhn publicaba su Origen del fuego y de la bebida divina, en donde se continuaban y difundían las premisas naturalistas postuladas por Müller, obra que encontró eco en El origen de la mitología (1860)67 de F. L. W. Schwartz, quien era cuñado de Kuhn.
La difusión de las ideas de Müller ejerció cierta influencia en los círculos intelectuales de la época, ganando un buen número de adeptos entre la escuela alemana de la Voelkerpsychologie. En 1863, la teoría naturalista fue importada a Francia por Michel Bréal. J. P. Vernant incluye, entre los adeptos de la escuela de mitología comparada, a los helenistas Ludwig Preller y A. H. Krappe en Alemania, junto a Paul Decharme en Francia.
Para la escuela de mitología comparada o escuela mito-naturalista, la mitología es, esencialmente, un modo de discurso que se inserta en los procesos de conformación del habla, el cual tiene su origen en la prístina experiencia de asombro del hombre ante los grandes fenómenos cósmicos.
"La mitología no es más que un dialecto, una antigua forma del lenguaje. La mitología se refiere, sobre todo, a la naturaleza, y, muy particularmente, dentro de este dominio, a aquellos fenómenos que parecen tener el carácter de la ley y el orden, que parecen llevar el sello de un poder y de una sabiduría superior; pero era aplicable a toda cosa: nada es excluido de la expresión mitológica; ni la moral, ni la filosofía, ni la historia, ni la religión se han sustraído a la magia de esa antigua sibila.
Pero la mitología no es la filosofía, ni la historia, ni la religión, ni la ética. Es, para usar una expresión escolástica, un quale y no un quid, una forma, y no algo sustancial. Esa forma, como la poesía, la escultura y la pintura, era aplicable a casi todo lo que el mundo antiguo podía admirar o adorar."
El trabajo del especialista en mitología comparada consistirá, entonces, en buscar a través del laberinto de las etimologías, de las evoluciones morfológicas y de las interferencias semánticas, los valores primeros que, en los inicios de los procesos de formación del lenguaje, expresaban el contacto e interacción del hombre con la naturaleza ("reducir cada mito a su forma primitiva" y "determinar, si es posible, la edad de cada mito").
Así, la explicación naturalista viene a complementar, e incluso a suplantar, al análisis filológico. Para Max Müller, los mitos constituyen una creación propia de la infancia de la humanidad; los hombres comenzaron a generar mitos en la por Müller denominada edad mitopeica (también periodo mítico o mito-poético), y es importante explicarlos porque así se explicarán también los presuntos orígenes de un no menos presunto sentimiento religioso universal...